Teóricamente, la arquitectura es una disciplina multisensorial que implica texturas, colores, sombras, sonidos y aromas. Sin embargo, en la práctica, a menudo se prioriza el lenguaje visual para explorarla, limitándose principalmente a la vista para identificar elementos arquitectónicos y navegar de forma autónoma en entornos construidos y contextos urbanos. Por lo tanto, es crucial integrar superficies táctiles en la arquitectura.
La ceguera y la discapacidad visual trascienden ser una condición o discapacidad; representan una forma alternativa de percibir el entorno que nos rodea. En este sentido, el tacto se convierte en un lenguaje y una guía fundamental para interactuar con la arquitectura. Según la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (Artículo 9), todas las personas tienen el derecho inherente de acceder al entorno físico en igualdad de condiciones con los demás.
Para permitir que las personas con discapacidad vivan de forma independiente y participen plenamente en todos los aspectos de la vida, los Estados Partes tomarán las medidas apropiadas para garantizar a las personas con discapacidad el acceso, en igualdad de condiciones con los demás, al entorno físico, al transporte, a la información y las comunicaciones -Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CRPD) - Artículo 9º
Aunque el pavimento táctil está compuesto por dos patrones, cada uno con un significado particular, su combinación crea caminos táctiles que se adaptan a diferentes factores y escenarios. Si bien no se debate el uso del pavimento táctil, a menudo surgen preguntas sobre cómo utilizarlo y guiar a las personas en varios escenarios. Es importante tener en cuenta que las especificaciones de fabricación pueden variar según la región. Además, pueden producirse ligeras variaciones en las aplicaciones según la ubicación. Sin embargo, el objetivo principal siempre es proporcionar una ruta segura para el desplazamiento, tanto en espacios abiertos como en interiores de edificios como estaciones de tren, centros comerciales, aeropuertos, bancos, hospitales, oficinas o estadios.
¿En qué escenarios se debe utilizar el pavimento táctil? ¿Cuáles son los tamaños comunes? ¿Por qué el pavimento táctil suele ser de color amarillo? A continuación, exploraremos algunos conceptos básicos y casos de diseño típicos para el uso y la guía de los pavimentos táctiles.
Tipos de motivos, tamaños y colores
El sistema de pavimento táctil consta de dos tipos: advertencia y guía. El pavimento de advertencia está compuesto por un patrón de puntos o domos detectables diseñados para personas ciegas o con discapacidad visual que utilizan un bastón blanco. Estos deben colocarse en lugares donde se comunica información crítica de seguridad, peligros inminentes y puntos de toma de decisiones.
El pavimento direccional o de guía, por otro lado, está compuesto por un patrón de líneas o barras que proporcionan direcciones claras y consistentes para que los usuarios con discapacidad visual las sigan. Deben colocarse para indicar una ruta de circulación accesible, ya sea al aire libre o en interiores, o un paso claro para los peatones, y deben ayudar en la orientación. En ambos casos, el pavimento de advertencia y guía puede percibirse a través del tacto, ya sea con los pies o con el bastón, lo que permite a las personas mantener una trayectoria recta y navegar de manera segura.
Típicamente, los patrones táctiles se componen en formato de baldosas, con los tamaños más comunes (X) —ver ilustración del formato de baldosas— siendo 610 mm (24 pulgadas), 450 mm, 400 mm y 300 mm, dependiendo de la región. El número de domos y barras puede variar según el tamaño del módulo. Por lo tanto, el espaciado entre ellos debe ajustarse según su tamaño. Además, estos elementos deben proporcionar un claro contraste visual con las superficies adyacentes de la pasarela, ya sea a través de un contraste de claro sobre oscuro u oscuro sobre claro. Por eso se utiliza comúnmente el color amarillo como elección de color.
Las baldosas pueden fabricarse con materiales como cerámica, concreto, caucho o plástico. En algunos casos, los elementos de domo y barra se fabrican individualmente en piezas de acero inoxidable, ofreciendo una alternativa al formato tradicional. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que, dependiendo del acabado del suelo adyacente, esta opción puede proporcionar menos contraste visual.
Aproximación a elementos y cambios de nivel
Existen elementos dentro de los espacios construidos que pueden representar riesgos para las personas con ceguera y discapacidad visual. No identificarlos puede tener consecuencias para la seguridad de las personas. En estos escenarios, es aplicable el uso de módulos de advertencia. Es necesario destacar la aproximación a elementos como cambios de nivel y elevación, bordes desprotegidos, pendientes como rampas, la parte superior e inferior de las escaleras, ascensores, bordes de plataforma, rampas para sillas de ruedas y bordillos deprimidos en las calles. Estos siempre deben ubicarse en la acera para evitar el tráfico vehicular.
Para facilitar la aproximación frontal a elementos como máquinas interactivas, mostradores, módulos de información o señalización táctil-visual, es crucial situar los módulos del pavimento de advertencia de forma que se minimice la distancia entre ellos y los objetos. Esta colocación precisa es esencial para evitar confusiones espaciales y garantizar un recorrido claro y directo hacia estos elementos. Además, ofrece a las personas con deficiencias visuales una indicación clara de la ubicación y los límites del objeto o la zona. Al proporcionar una referencia táctil y visual precisa cuando se acercan de frente, les permite evitar posibles obstáculos con eficacia.
Es importante asegurarse de que los módulos de pavimento de advertencia estén correctamente alineados y fijados para que su terminación coincida exactamente con el borde frontal del objeto o cubierta relevante. Esto proporciona una transición suave y segura entre el pavimento táctil y el objeto, facilitando la detección y el reconocimiento.
Trayectoria táctil y configuraciones típicas
La ruta táctil es una combinación de pavimentos táctiles de advertencia y guía diseñados para trazar una ruta clara y despejada desde el punto A hasta el punto B. Su función principal es proporcionar orientación y orientación seguras y accesibles para las personas, asegurando que no haya elementos que obstaculicen el tránsito o representen riesgos para los usuarios. Esta ruta es particularmente valiosa en entornos construidos con grandes áreas abiertas, distancias largas y espacios altamente transitados.
Se recomienda instalar la ruta táctil desde las entradas principales hasta el primer punto de comunicación, como puertas de entrada, módulos de información y otros. En espacios públicos, es común encontrar este tipo de ruta en lugares como estaciones de transporte terrestre, donde debe cubrir el área desde la entrada hasta la zona designada de abordaje de vehículos. En las calles, es típico trazar la ruta en las aceras para guiar a las personas hacia la franja táctil de advertencia antes de cruzar una intersección peatonal.
Los senderos táctiles deben ser fáciles de recorrer, dando prioridad a los caminos rectos y a los cambios de dirección de 90 grados con al menos un módulo de pavimento de advertencia o con 4 o más módulos cuando sea factible y sin crear obstáculos. Deben evitarse los recorridos redundantes o las interrupciones bruscas causadas por rejillas, desagües o juntas de construcción. En los casos en que no sea posible realizar cambios de dirección de 90 grados, debe procurarse que el cambio de dirección no tenga ángulos pronunciados (45 grados como máximo). Cuando se trate de interrupciones inevitables, pueden utilizarse pavimentos de advertencia táctiles para señalar su presencia, siguiendo los criterios de aproximación y cambios de nivel.
La combinación de pavimentos táctiles con elementos como la señalización en Braille y los mapas táctiles mejora la navegación de las personas con discapacidad visual. La señalización en braille permite identificar espacios importantes, como salas de reuniones, aseos y entradas, proporcionando autonomía en la localización de estos elementos. Los mapas táctiles ofrecen una representación tridimensional del entorno, lo que facilita una mejor comprensión de la disposición y ayuda a orientarse con precisión. Estos elementos adicionales enriquecen la experiencia de los usuarios, fomentando su inclusión y proporcionando herramientas eficaces para una navegación autónoma y segura. Es importante mencionar que siempre será crucial involucrar a profesionales en el campo de la accesibilidad para desarrollar propuestas que estén totalmente alineadas con cada proyecto.
Al hacer hincapié en la integración del pavimento táctil en las primeras fases del proceso de diseño, los arquitectos pueden maximizar su impacto en la accesibilidad general y la inclusividad de un edificio. Cuando se incluye como elemento de diseño esencial, los arquitectos pueden incorporarlo sin problemas a diversos elementos arquitectónicos, como caminos, entradas y transiciones, garantizando su integración armoniosa con la estética y la funcionalidad generales del espacio. Desde su invención por Seiichi Miyake en la década de 1960 en Japón, el pavimento táctil se ha extendido gradualmente por todo el mundo. Aunque existen diferencias en su aplicación entre países, su uso se ha ido extendiendo. Representa una poderosa herramienta de orientación en cualquier espacio, proporcionando accesibilidad y seguridad, contribuyendo en última instancia a crear edificios inclusivos. Esto puede marcar la diferencia entre poder experimentar la arquitectura de forma independiente o no.
